Detecta el problema en la interacción de las personas y las relaciones.
Se interesa en la manera que los problemas del pasado se manifiestan en el presente y utiliza el contexto de la vida actual para resolverlo. Se ocupa de Parejas, Familias y también individuos. Identifica los círculos viciosos que generan sufrimiento y promueve los círculos virtuosos a través del cambio.
Es especialmente recomendada en los casos en que el portador del problema no quiere acudir a terapia o en problemas vinculares.